Que Canarias cuenta con playas espectaculares y únicas es bien sabido por todo el mundo, pero nunca está de más presumir de ello. Es muy frecuente que alguna se 'cuele' en las prestigiosas listas de turismo.

En este ocasión, El Viajero de El País ha elaborado una lista de arenales para pasar ''un veroño de mar y playa''. En ella se encuentran dos paraísos canarios para combatir los días calurosos que alegran el principio del otoño.

Es el caso de La Zamora, en el municipio palmero de Fuencaliente y Caletón Blanco en el municipio lanzaroteño de Haría.

Sobre la primera playa, el artículo afirma que "en esta agraciada cala de arena negra se explicitan los pros y los contras de extender la toalla bajo una pared acantilada. Desde 2009, La Zamora Grande tiene la escalinata de acceso cerrada, mientras que en La Zamora Chica se permite negociar sus 85 escalones tras blindarse la pared con una gran malla de alambre galvanizado de triple torsión. Tomaremos el sol protegidos de eventuales desprendimientos, en una costa roída, desmoronada por el oleaje. El Atlántico es traicionero aquí, especialmente con mal tiempo, y la playa resulta muy rocosa en marea baja. Por el contrario, las puestas de sol son subyugantes tras la guirnalda de islotes llamada Siete Islas. Una parada en el quiosco de pescado fresco puede completar esta jornada marina que, también desde la mesa, regala paisajes impresionantes. Si acudimos por la tarde evitaremos las aglomeraciones".

Por otro lado, "la anatomía de la cala se integra en el malpaís que escupió el volcán de La Corona. Pero no es en su quietud ni en la transparencia de sus cielos, señalados por el roque del Este, donde reside el mayor encanto de este caletón. Cual piscinas naturales, merced a la barrera que la protege de las sacudidas del Atlántico, los charcones de aguas diáfanas que se forman en pleamar funden las tonalidades de oscuros roquedales basálticos, arena y mar. Encontraremos el acceso poco antes de llegar a Órzola, en el punto kilométrico 31,800, tras un tramo de carretera de extrema belleza. Las calmas de septiembre y octubre ayudan a disfrutar de este paraje tan bello como desguarnecido", describre en el caso del arenal de Lanzarote.

Completan esta prestigioso listado Cala de Cambriles (Lújar, Granada), Cala del Senyor Ramon (Santa Cristina d´Aro, Girona), Chicré (Níjar, Almería), Cala del Aceite (Conil de la Frontera, Cádiz), Cala Figuera (Pollença, Mallorca), Cerrias (Piélagos, Cantabria), Arenal d´en Castell (Es Mercadal, Menorca), Quartell Vell (Cabanes, Castellón), Bozo (Valdés, Asturias) y Lagos (Bueu, Pontevedra).