La seguridad se ha convertido en la mayor preocupación de las salas de exhibición cinematográfica y los teatros que han vuelto a abrir sus puertas al público después de haber permanecido cerrados durante casi tres meses a causa de la pandemia provocada por la Covid-19.

Principales medidas de seguridad

Durante el confinamiento se prepararon toda una serie de protocolos para garantizar que los espectadores pudieran recuperar sus actividades culturales favoritas tras la desescalada, siguiendo una serie de medidas de protección que se han puesto en funcionamiento después de haber sido aprobadas por el Gobierno y que responden a una serie de precauciones lógicas que no difieren demasiado a las que se recomiendan en otros aspectos de la vida diaria para evitar la propagación del virus.

Estas son algunas de las indicaciones para regresar al cine y al teatro sin miedo al coronavirus:

- Será imprescindible el uso de la mascarilla para acceder a las sesiones.

- El establecimiento pondrá a disposición del público dispensadores de geles hidroalcohólicos o desinfectantes con actividad virucida autorizados y registrados por el Ministerio de Sanidad, en la entrada, en las zonas comunes y en los aseos.

- La desinfección de las salas tendrá lugar cada vez que los espectadores abandonen una sesión y antes de que empiece la siguiente.

- Se establecerán marcas de distanciamiento en el suelo en el acceso a la sala.

- La apertura de puertas se realizará con antelación suficiente para permitir un acceso escalonado, debiendo fijarse previamente franjas horarias adecuadas para el acceso, por lo que disminuirán el número de sesiones.

- La salida del público al término del espectáculo será hará también de forma escalonada, por zonas, garantizando la distancia entre las personas.

- Se realizarán, antes y después de la representación, avisos que anuncien y recuerden las medidas de higiene y de distanciamiento.

- No se entregará libreto ni programa, ni otra documentación en papel. Los programas de mano estarán a disposición a través de las respectivas páginas web y a través de códigos bidi situados en el acceso a las salas.

- Se elimina también el corte de entrada, que se hará a través de un lector de códigos de barra

- Respecto a la adquisición de entradas por los usuarios se recomienda su venta online o telefónica. En caso de que la compra deba realizarse en la taquilla se fomentará el pago con tarjeta u otros medios que no supongan contacto físico entre dispositivos, evitando, en la medida de lo posible, el uso de dinero en efectivo. Se limpiará y desinfectará el datáfono tras cada uso, así como el TPV si el empleado que lo utiliza no es siempre el mismo.

- No está permitida la prestación de servicio de guardarropa ni de consigna.

- La prestación de servicios de tienda, cafetería o similares, se ajustará a las normas que la orden establece para dichas actividades: en ningún caso se admitirá el autoservicio en barra por parte del cliente; se podrá ofrecer productos de libre servicio, ya sean frescos o elaborados con anticipación, para disposición de clientes siempre que sea asistido con pantalla de protección, a través de emplatados individuales o monodosis debidamente preservadas del contacto con el ambiente; y se eliminarán productos de autoservicio como servilleteros, palilleros y otros utensilios similares, priorizando monodosis desechables o su servicio en otros formatos previa petición del cliente.

- No habrá contacto entre el personal de la sala y los espectadores. La distancia entre ambos será siempre de dos metros.

- Todas las sesiones estarán debidamente numeradas para establecer las medidas de porcentaje de aforo, inhabilitándose las butacas que no cumplan con los criterios de distanciamiento físico, así como las no vendidas. Se evitará, en los posible, el paso de personas entre las filas, que suponga no respetar la distancia de seguridad.

- Se facilitará la agrupación de convivientes, manteniendo la debida distancia de seguridad con el resto de espectadores.