El milagro de Nico Brussino

El partido del Dreamland Gran Canaria en el Palau, más allá de la derrota sufrida por los claretianos en la prórroga frente al Barça, dejaba en la retina de los aficionados claretianos una actuación para el recuerdo, más allá de las estadísticas -14 puntos, dos rebotes y cuatro asistencias-, la de Nico Brussino. El argentino conseguía recuperarse en apenas nueve días de una fractura del cartílago costal, una lesión que en una persona normal le habría tenido como mínimo alejado de la competición entre cuatro y seis semanas, para saltar a la pista como títular y ofrecer una exhibición en ataque y en defensa. Un ejemplo del compromiso del de Cañada de Gómez con la elástica amarilla.

Como todo en esta vida suele tener una explicación lógica y científica, en el caso de la presencia del internacional albiceleste en la cancha no podía ser menos. El doctor Néstor Moreno confirma la existencia de «una fractura en el cartílago costal, que produce dolor y una mayor o menor pérdida de la función», si bien aclara que «dependiendo del lugar en el que se encuentre afecta más o menos; en el caso del torax no es lo mismo que afecte a una costilla alta que a una baja, o que esté situada por delante o por detrás».

El otro factor a tener en cuenta es la condición de Nico Brussino de deportista de alto rendimiento, «que hace que tenga una tolerancia al dolor por encima del resto de la población». «El compromiso del jugador es incuestionable, quería jugar y puso todo su empeño en conseguirlo», explica el galeno claretiano, que ante ese panorama, «como miembros de los servicios médicos del club nos centramos en ir cumpliendo etapas para conseguir que pudiese estar en condiciones de jugar».

Una lesión sufrida por Durant

«La lesión sufrida por Brussino es más propia de otros deportes como el fútbol americano o del hockey hielo, aunque hace unos años la sufrió en la NBA Kevin Durant», relata Néstor Moreno, quien resalta que «cualquier lesión genera contracturas alrededor de la zona al adoptar posturas que no son habituales y en ese sentido es importante desde la parcela de la fisioterapia el intentar que la parte sana se mantenga así, mientras que la parte afectada se trata con medicación antiinflamatoria y hay que tratar el dolor». «Hay también una parte de entrenamiento invisible que no se ve y que es importante en ese trabajo de prevención de lesiones, porque entre partido y partido suelen pasar muchas cosas y siempre hay que controlarlas», explica el doctor.

«El riesgo cero no existe, hay cosas que desde un punto de vista científico no se pueden hacer, y en ese sentido la localización concreta de esta lesión nos dejó hacer una serie de cosas para tratar la lesión y el dolor que le genera», reconoce el galeno del Granca.

En referencia al excelso nivel ofrecido por Brussino en el encuentro ante el Barça, Néstor Moreno reconoce que el objetivo que se buscaba era que «pudiese jugar en las mismas condiciones que sus rivales, y el resto ya es mérito totalmente del jugador».

En la misma línea, Lionel Montelongo, uno de los dos fisioterapeutas del Granca junto a Gabriel Torres, recalca «el nivel del umbral del dolor» y el grado de compromiso de Nico, «que no se encuentra en todos los jugadores». «Nosotros, con las pruebas médicas en la mano, siempre valoramos todos los riesgos, porque la salud del jugador siempre está por delante, siendo conscientes de que el riesgo cero nunca existe, pero siempre intentamos reducirlo al máximo y que el jugador juegue con las máximas garantías».

En cuanto al plan trazado para recuperar al argentino, relata que el objetivo principal es «tratar el dolor y sus funciones mediante el tratamiento de fisioterapia y recuperación, porque al final el jugador ya sabemos que está lesionado».

«Al final le dolían todos los huesos del cuerpo»

Lionel Montelongo reconocía que, entre la lesión, el no haber podido entrenar toda la semana y el esfuerzo brutal realizado, a Nico Brussino al finalizar el encuentro ante el Barça «le dolían todos los huesos del cuerpo». Tanto el fisio del Granca como el doctor Néstor Moreno no tienen dudas de la predisposición del jugador para estar a disposición del técnico para el choque ante el Girona del viernes y el del Granada del domingo, siempre que Jaka Lakovic lo decida utilizar. Toda decisión relativa a las opciones de contar con un jugador lesionado «es el resultado de una decisión consensuada entre el cuerpo técnico, los servicios médicos, incluidos los fisioterapeúticos y la predisposición del propio jugador, que en el caso de Brussino fue total para jugar ante el Barça desde el primer momento», explica Montelongo.

«Se trata de un jugador con mucho carácter y cuando decide entrar a jugar siempre lo hace como lo que es, un valiente, y por eso no me sorprendió su gran partido en el Palau», explica el fisio de los amarillos, quien destaca que su presencia resultó «motivadora» para el resto de compañeros, «igual que sucedió con John Shurna el año pasado en la final de la Eurocup» ante el Turk Telekom, cuando el Granca levantaba el trofeo en el Arena.

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