El Dreamland Gran Canaria sella matemáticamente su presencia en el Playoff a costa del Joventut

Misión cumplida. El Dreamland Gran Canaria pudo homenajear por todo lo alto a otra de sus leyendas, Brad Newley, quien recibió el calor de la marea amarilla y pudo disfrutar de una victoria, la décima en casa de forma consecutiva de los amarillos, en lo que va de temporada y de paso sellar su clasificación matemática para la disputa del Playoff a tres jornadas para el final de la liga regular (97-79).

Tras una primera parte en la que el Granca no pudo desnivelar el partido a su favor, consiguió en la segunda mitad imponer su ley para borrar de la pista por momentos a un Joventut que virtualmente dice adiós a sus opciones de pelear por el título.

En la parte negativa cabe anotar la lesión de Nico Brussino en el tercer acto que le obligó a tener que abandonar la pista de juego con un fuerte golpe en el costado.

Exhibición de Shurna

Un triple de Nico Brussino servía para inaugurar el marcador, si bien era John Shurna, tocado por la varita mágica, quien hacía las delicias del respetable para mantener la ventaja en los primeros compases del choque, contrarrestando el acierto coral de la Penya, ante el que se bastaba el 14 con su mejor actuación individual hasta el momento en lo que va de año, con dos triplazos incluidos (17-13).

La segunda unidad tomaba el relevo en la pista y Ben Lammers se encargaba de dar su carta de presentación con el primer gorro de la tarde, seguido de un triple del gran capitán, Andrew Albicy, que encendía al público del Arena antes de que el juego se tuviese que detener por una fortuita lesión de Cook en una defensa al base francés del Granca.

El Joventut apretaba en defensa y encontraba en el exterior a Ruzic quien con dos triples consecutivos conseguía voltear la ventaja y colocar a los verdinegros por delante en el electrónico a falta de algo más de un minuto para el final del primer acto (20-21).

Un 2+1 de Miquel Salvó permitía a los amarillos enfilar el descanso entre actos por delante en el marcador, además de ver como Ferran Bassas pisaba la pista tras sus dos partidos ausente por lesión, cerrándose el primer cuarto con un reñido 24-21 en el luminoso.

Bassas se suma a la fiesta

El segundo acto lo inauguraba el propio Bassas con cinco puntos de su cosecha particular, triple desde la esquina incluido, mostrando ante sus ex su mejor versión en su reaparición.

Landesberg, una vez más, mostraba una pobre imagen en cuanto al acierto de cara al aro y de aportación en la pista, optando Jaka Lakovic por relevarle, apostando por mantener en pista juntos a Salvó y Brussino. Los amarillos se atascaban en ataque y Ante Tomic aprovechaba para recuperar la ventaja transformando un 2+1 a cuatro minutos del descanso (33-34).

El técnico claretiano no terminaba de estar satisfecho con el juego de sus hombres y decidía pisar el pedal del pánico tras anotar Kraag una bandeja en una contra que colocaba el 34-36 en el luminoso a poco menos de tres minutos y medio para el descanso.

Brodziansky intercambiaba triples con un iluminado Shurna que volvía a convertirse en protagonista en el momento más necesario para mostrar el camino a los suyos, encontrando en Jovan Kljajic, el héroe de Lugo, al escudero ideal para minimizar un nuevo lanzamiento lejano de Ruzic y una canasta de Guillem Vives que cerraba la primera parte con un ajustado 43-44.

El intercambio de golpes en el arranque del tercer asalto no le bastaba a los amarillos para recuperar el mando en el electrónico. Ribas y Tomic mantenían a los verdinegros por delante a pesar de las canastas de Ethan Happ, Jovan Kljajic y un John Shurna que volvía a perforar el arco rival desde fuera del perímetro para mantener a los amarillos en la pelea (53-55).

Una baja inesperada

La revolución claretiana llegaba de la mano de Nico Brussino con un triplazo desde la Pampa y un 2+1 que premiaba el esfuerzo de los amarillos. El argentino lideraba la ofensiva de los isleños hasta que en una acción defensiva sufría una lesión que le obligó a tener que retirarse a poco menos de tres minutos para el final del tercer acto.

La recta final del asalto volvía a contar con el protagonismo de John Shurna para colocar a los claretianos en la barrera de los 10 puntos en el último cuarto del partido (73-63).

La Penya apretaba pero el Granca jugaba con criterio, favorecido por el marcador, con Salvó, Jovan Kljajic y Pelos aportando agresividad en defensa, mientras Ferran Bassas seguía empeñado en demostrar que había vuelto con ganas con un nuevo triple que minimizaba las visitas de Tomic a la línea de castigo.

El Granca se gustaba en la recta final del partido, mostrándose cómodos a pesar de los intentos del Joventut por maquillar el marcador final, para cerrar su décima victoria consecutiva en el Arena (97-79) y sellar matemáticamente su clasificación para el Playoff.

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