La presentadora Cristina Pedroche dio la campanada de la noche de fin de año con un vestido muy Wonder Woman. Nadie atendió al cocinero Chicote, su compañero en las uvas, todos miraban los detalles de un vestido que llevó "meses de preparativos", según indicó la presentadora, cuyas transparencias se han convertido en la noticia televisiva de la Nochevieja. El vestido, repleto de estrellas y con corsé, era de Pronovias, diseñado por Hervé Moreau.
"Es una noche especial y mágica, por eso las estrellas", explicó Pedroche. Chicote, al que nadie miró, también llevaba calcetines con estrellas plateadas. Para la elección del vestido, la presentadora contó con la ayuda del estilista Josie. Nadie pudo eclipsarla. Si acaso, su marido, el cocinero David Muñoz, que hace unos días apareció en las redes sociales probándose el vestido transparente que Pedroche lució al dar la bienvenida de 2016.
Los osados atuendos que Pedroche prodiga en la última noche del año se han convertido ya en un clásico como las uvas o la manecillas del reloj de la Puerta del Sol. Y hablando de ese enclave, cualquiera diría que había más gente en la Puerta del Sol mirando a la ventana en donde Cristina Pedroche lucía vestido que mirando al propio reloj.
Quitando esos cinco minutos de programación, el resto de la oferta de Antena 3 en la noche más importante del año se ajustó al concepto genérico de Nochevieja: recopilaciones, imitaciones y recopilaciones de imitaciones. Programas como Tu cara me suena o Ahora caigo reaparecieron en el condensado de fin de año. Es como si todo lo que tiene de interés durante el año lo ofrece Antena 3 regurgitado la noche del 31 de diciembre?
Pedroche se ha convertido en uno de los grandes fenómenos de la televisión española. Desde sus inicios pizpiretas en Sé lo que hicísteis a su presente como sex symbol patrio, ha logrado labrarse una exitosa trayectoria.
